POR UN PUÑADO DE SERIES: Supernatural Season 11
El boom
estratosférico que está suponiendo el mundo de las series es innegable.
Desde este nuestro humilde apartado “Por un puñado de
series” nos hemos propuesto ponerte al día de todas las novedades del sector.
Desde estrenos hasta cancelaciones, pasando por cualquier
noticia de interés que creamos que os pueda interesar.
No dudes en preguntarnos nuestra opinión de alguna serie
sobre la que no estés muy seguro y, en la medida de lo posible, te escribiremos
una reseña con nuestro punto de vista.
Este primer post va dedicado a la onceava temporada de una serie ya mítica: Supernatural.
Después de 11 temporadas se podría prever que ya nada podía
sorprendernos, pero los Winchester lo han vuelto a conseguir, hay un nuevo mal
al que enfrentarse. Conforme avanza la serie, hemos visto la evolución de los
personajes, un Sam mucho más seguro
de sí mismo y un Dean cada vez más
inundado de culpa. Ahora, tras luchar contra infinidad de seres sobrenaturales
y volver desde el cielo, el infierno y hasta del purgatorio, los hermanos, se enfrentan a un nuevo reto, vencer a “La
Oscuridad”.
Dean Winchester (Jensen Ackles) continúa buscando su camino
tras los acontecimientos que le relacionaron con su lado oscuro en la anterior
tanda de capítulos, buscando la redención y dispuesto a eliminar a todo ser
no-humano que se presente en su camino. Por su parte Sam (Jared Padalecki) ha
ido asentándose y dejando de lado cada vez más notoriamente su carácter temeroso
y un tanto egoísta y convirtiéndose en alguien más duro y preocupado por todos.
La “season premiere” comienza donde acabo la anterior
temporada y nos presenta un hilo conductor central bastante atractivo.
Si bien pudiera parecer que los efectos que provoca esta
nueva plaga, a la que se enfrentan los protagonistas, es un tema algo trillado
y que podemos haber visto con demasiada asiduidad últimamente en diferentes
series o películas, tenemos la suerte de
contar con buenas subtramas de los personajes secundarios, Castiel y sus
ángeles y Crowley con sus demonio, que
siempre dan agilidad a la historia.
Las actuaciones, como hasta ahora, son correctas, si bien es cierto que se echa
de menos el toque de humor que caracteriza a la serie en estos primeros minutos
de la temporada, la química entre los protagonistas sigue siendo patente.
Si tenemos que dar una mención especial, esta va si duda hacía la banda sonora, que temporada tras temporada no ha ido regalando canciones legendarias del rock americano.
Poco más se puede contar de este primer capítulo sin caer en
los temidos spoilers, así que te recomiendo que lo veas y extraigas tus propias
conclusiones.
Aquí empieza “Por un puñado de series”, espero que lo disfrutes.
Un saludo.
A.
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